Monday, April 03, 2006

ABORTO POR DECRETO

Obligar a hacer abortos
La llamada Red de Expertos Independientes para los Derechos Fundamentales,
presentó un informe al parlamento europeo en el que aconseja sancionar a los
médicos que se acojan a la objeción de conciencia para no practicar abortos.
La Red de Expertos que tiene como función "velar por la esencia de los
valores fundamentales de Europa", define el aborto como "derecho humano
internacional", por encima de la "objeción religiosa de conciencia", y
recomienda que se tomen medidas para que ningún médico pueda limitar ese
"derecho inalienable" de la mujer. "Las conclusiones reflejan todos los
argumentos presentados por el lobby para los derechos sexuales y
reproductivos", dijo Irene Donadío, en nombre de la Federación Internacional
de Paternidad Planificada (IPPF), la internacional del aborto y la
perversión de menores.
También forman parte de la Red de Expertos, el Centro para los Derechos
Reproductivos (Center for Reproductive Rights) y el grupo de apóstatas
Católicas por el Derecho a Decidir -que también están actuando en Colombia y
Brasil impulsando la legalización del aborto-, y la organización Slovakia
Pro-Choice.
El objetivo de esta jugada política es boicotear el acuerdo entre la Santa
Sede y Eslovaquia, que prevee expresamente el reconocimiento del derecho
natural a la objeción de conciencia del personal sanitario e investigador
para negarse participar en abortos, la eutanasia, y las investigaciones con
embriones.
Una nueva cultura
La asociación de apóstatas Católicas para el Derecho a Decidir y otras 500
organizaciones que se autotitulan abanderadas de los "derechos de la mujer y
líderes de los derechos humanos", presentaron una queja al parlamento
europeo y a la prensa en la que se califica de "ultraje a las víctimas del
holocausto" la comparación de entre las políticas de aborto y el holocausto
nazi.
La causa de la protesta fue una exposición organizada en noviembre pasado
por eurodiputados polacos que equiparaba el aborto al holocausto, y que
originó una trifulca verbal y física entre sus responsables y parlamentarias
progresistas. La exposición fue cancelada el mismo día que se inauguró.
La muestra, ideada entre otros por Maciej Giertich, dirigente de la
nacionalista y católica Liga de las Familias de Polonia, tenía como motivo
oficial el "derecho a la vida y la defensa de los niños" y se exhibió en una
de las dependencias de la sede del Parlamento en Estrasburgo. Entre los
paneles que la componían, uno relacionaba el aborto con una fotografía de
niños en un campo de concentración en la Segunda Guerra Mundial lo que
suscitó las protestas airadas de eurodiputadas socialistas como la
portuguesa Ana Gomes o la alemana Lissy Grooner, que pidieron la retirada de
la exposición.
En la protesta escrita de las 500 ONG's abortistas se describe a los
organizadores de la exposición como "ultraconservadores, extremistas
religiosos, apoyados por la Iglesia Católica polaca", y se los define como
"un verdadero peligro para la nueva política cultural de la Unión Europea".
Según la protesta encabezada por Católicas para el Derecho a Decidir, la
Unión Europea está basada en un consenso "secular", el "estado laico", que
al parecer incluye una cultura antivida y antirreligiosa.
No es un secreto que uno de los dogmas del progresismo política y
culturalmente correcto es la "prohibición" de comparar el aborto con el
holocausto. Si para la "nueva cultura" hay asesinatos o exterminios masivos
justificables (aborto) y otros injustificables (holocausto), lo que queda
claro es que si para los abortistas no cuenta la dignidad de los millones de
víctimas del aborto, tampoco cuenta la dignidad de las víctimas del
holocausto porque las convierten en puro objeto de propaganda.
Algunos interpretan la declaración de las 500 ONG's como una prueba de la
frustración del "progresismo" europeo ante la resistencia de algunos países
a renunciar a su herencia cristiana y a su soberanía jurídica, de modo que
-en el colmo de su totalitarismo- pretenden exigir a todos los candidatos a
cargos políticos del gobierno europeo la condición básica de apoyar esa
nueva cultura antivida y antirreligiosa.
USA: Convicciones morales o profesión
El gobernador de Illinois, Rod Blagojevich, abolió de hecho la objeción de
conciencia de los farmacéuticos, al decretar que todos deben vender los
medicamentos aprobados por la autoridad sanitaria, si se presenta la receta
correspondiente, sin que se admita legalmente ningún tipo de reparo.
La medida fue provocada por la negativa de varios profesionales amparándose
en razones de conciencia, a vender los abortivos conocidos como "píldora del
día después", incluso el llamado Plan B, cuya autorización de venta se
encuentra en revisión.
"El gobernador está obligando a los farmacéuticos a elegir entre sus
convicciones morales y su profesión", declararon dos miembros de la
legislatura estatal que presentaron un proyecto de ley para revocar la
medida (Ron Stephens y Mulberry Grove, proyecto House Bill 4246, Cámara de
Representantes de Illinois)
Los farmacéuticos que en Illinois y en otros estados que recurrieron a la
objeción de conciencia para no vender abortivos han sido calificados de
"asesinos", por Planned Parenthood, filial norteamericana de la IPPF, la
internacional del aborto y la perversión de menores.
Una estrategia nacional
El 8 de diciembre pasado, Mitt Romney, gobernador de Massachussets, anunció
que virtud de la nueva legislación del estado los hospitales católicos y
otras instituciones de salud privadas, sin tener en cuenta su ideario ético,
están obligados a ofrecer los métodos abortivos de "anticoncepción de
emergencia" a mujeres víctimas de violación.
No sólo se trata de una medida arbitraria sino que además en este caso, es
un cambio de postura sorprendente en un gobernador que había afirmado hasta
hace poco lo contrario.
Por acuerdos anteriores a la nueva legislación los hospitales privados
estaban protegidos y podían exceptuarse de proveer servicios de aborto
(químico o quirúrgico) y/o de contracepción.
Daniel Avila, director de política e investigación de la Massachusetts
Catholic Conference, declaró que si bien la nueva ley (Emergency
Contraception Access Act) contradice acuerdos anteriores, los hospitales
católicos tienen suficientes argumentos jurídicos para desobedecerla.
Para Avila, la maniobra forma parte de una estrategia nacional que tiende a
coaccionar a las instituciones católicas para que aseguren la cobertura y la
realización de abortos, ya sea por medios químicos como quirúrgicos.
Juan Bacigaluppi

3 comments:

Anonymous said...

Excelente artículo, gracias por enviármelo

Anonymous said...

Gracias por todas las mensajes.
Tengo las aprovechado mucho y las divulgado entre los amigos y familiares.

Lucilene de Angelis

Anonymous said...

La verdad que resulta bastante curiosa esta actitud,sobre todo para los que vivimos una epoca en que el fumar era signo de "liberacion" en la mujer y virilidad en el hombre, y esto fue reforzado desde todos los aspectos, con publicidad de todo tipo (Marlboro etc..) el hombre diez...fumaba.
Ahora parece que nos fuimos al otro extremo, y tal vez el resultado final sea bueno, pero lo que no es bueno desde luego, es ver la vida desde estas radicalidades extremas que siempre son signo de profunda neurosis subyacente.
Ni fumar es el infierno ni no fumar el paraiso, simplemente es una cuestion de conductas y el hombre adulto debe hacer con ellas una modulacion que no pase por los extremos.....todos los "ismos" son malos.